TRAVESÍA SUPERCONJUNTADA DE PORTUGAL, DUODÉCIMA PARTE (II)

Día 1 : Belém - Estoril


De Belém a (Monte) Estoril, por la Marginal y callejeando y por la Marginal y callejeando y por la Marginal y callejeando y por la Marginal...



Una etapa muy urbana, pero con alguna que otra pequeña sorpresa. Yo pensaba que las casitas en los árboles solo existía en los cuentos infantiles, pero no... ¡aquí hay una!


Más Marginal...

Y más Marginal...

... hasta llegar a Caxias con ese pequeño fuerte que tiene, tan simpático y que siempre ves desde el tren y quieres ir y nunca vas... y una playita, toda para mí, qué gusto...

Entré a ver qué pasaba en el fuerte, no pasaba nada, naturalmente, y no había nadie. Bueno, no había nadie durante dos o tres segundos, hasta que de repente un hombre sobre una bicicleta llega a toda pastilla y se mete en el fuerte detrás mía (bueno, el contrafuerte, o el prefuerte, o como se diga, porque la puerta principal está cerrada). Pero este ¿qué querrá? pienso yo, naturalmente recelosa, desconfiada y llena de odio, "desculpe" dice cuando casi se me lleva por delante, luego se baja de la bici de un salto y se queda atándola a la pared o algo, yo qué sé, o merodeando sospechosamente cerca del muro, yo me voy directamente a la otra mitad del fuerte (total, las dos mitades son iguales), porque desde luego parecía que había venido a aliviarse de alguna necesidad y no sé cuál, y aunque los tíos raros normalmente no piden disculpas pues yo qué sé, hay que ir sobre seguro. Pero cuando vuelvo de mi mitad veo que la puerta del fuerte ahora está abierta... son las 10.30 de la mañana y en la puerta pone "Abierto al público desde las 10.00", aaaah, ¡si es el hombre que abre el fuerte al público!, jajaja, además llega tardísimo, de ahí las grandísimas prisas, claro... Digo, bueno, no voy a entrar a dar explicaciones, ya está bien con haber visto la mitad exterior, y sigo camino. Pero a los pocos segundos me lo encuentro en el bar... o sea que ha abierto la puerta y salido como una flecha a tomarse un café, claro, es domingo, habrá salido anoche, jajaja jajaja jajaja....


Estupenda "parada del Sumol" (y del rissol) en este bonito bar en Paço d'Arcos (detrás de la estación), normalmente si el camarero está en la puerta de reclamo no entro (ya os digo, soy antipatiquísima) pero esta vez digo bah, sí, y él y su mujer eran muy amables y me encantó la parada del Sumol, además es algo que te ayuda a reponerte cuando llegas con calor y cansancio y solo pensando en cómo sería quitarte los zapatos, meter un pie en el wáter y tirar de la cadena y luego meter el otro y hacer lo mismo... (sí, pienso en estas cosas, pienso a veces que sería maravilloso y asqueroso a la vez, nunca lo he hecho. Bueno, estas cosas ya las llevo mejor...).


Finalmente (cinco horas y media, una etapa un poco dura, oye, de estas etapas que no te puedes fiar y tienes que mirar el mapa cada diez minutos para asegurarte de que vas bien, ya sé que Lisboa-Estoril no debe de ser así pero lo es, es más reconvoluto que lo que parece, no es todo Marginal) (además iba poniendo mensajes la mitad del camino con una amiga que al final no vi), pues eso, finalmente me doy cuenta de que ¡estoy en Estoril! Por fiiiin,
Otra excusa para bailar un poco...

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Mañana más (mañana Estoril-Sintra, de la A16 al Triángulo de las Bermudas, ohú ohú ohú...)